Seguir una dieta cardiosaludable es esencial para controlar el colesterol, mantener equilibrada la tensión arterial, conservar un peso saludable y minimizar el riesgo de desarrollar problemas cardiovasculares graves, como enfermedades coronarias o ictus. Es importante recordar que este plan de alimentación debe ir acompañado de ejercicio físico regular y abstenerse de fumar para garantizar una salud óptima.
Existen varias opciones a la hora de elegir planes de alimentación para una salud cardíaca óptima. La dieta de la Asociación Americana del Corazón, la dieta DASH, la dieta mediterránea y el Plato de Oxford son sólo algunas de ellas.
Con todas estas alternativas a su disposición, puede decidir cuál es la más adecuada para satisfacer sus necesidades dietéticas
Todos deberíamos adoptar una alimentación saludable para su corazón. No es sólo para quienes padecen problemas cardíacos o tienen mayor riesgo de padecerlos; es algo que todos debemos incorporar a nuestra rutina diaria La alimentación cardiosaludable consiste en sustituir los alimentos poco saludables por otros más sanos, así como en reducir la cantidad que consumimos. Este cambio de estilo de vida puede ayudarle a llevar una vida más sana y feliz.
Si usted sufre de problemas cardíacos recuerde consultar a su especialista, pero debe de saber que hay dietas específicas para los problemas cardiovasculares.
Algunas ideas sencillas para mejorar su salud son:
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Para mantener sano el corazón, aliméntese con alimentos ricos en nutrientes que le ayuden a regular los niveles de colesterol, tensión arterial y glucosa, a la vez que favorecen una circulación adecuada.
Para mantener su corazón sano, asegúrese de incluir estos alimentos nutritivos en su menú diario. Añadirlos a su lista semanal de la compra es una forma sencilla de empezar a llevar un estilo de vida más saludable que favorezca la salud cardiovascular.
Las nueces son una fuente de energía nutricional que encabeza las listas de los mejores alimentos para la salud del corazón. Su alto contenido en ácidos grasos Omega-3 ayuda a controlar y regular la presión arterial, al tiempo que reduce los factores de riesgo asociados a las enfermedades cardiovasculares.
Las legumbres son auténticas aliadas en la lucha contra las enfermedades cardiovasculares. Por ejemplo, si se consumen regularmente, reducen en un 14% el riesgo de sufrir un infarto de miocardio o una angina de pecho, según informa la Fundación Española del Corazón (FEC). Además, los garbanzos, las lentejas y otras legumbres pueden ayudar a reducir el colesterol malo por su composición rica en fibra y su bajo contenido en grasas.
El omega-3 es un nutriente comúnmente conocido, y el pescado azul como el salmón, el atún, las sardinas o la caballa son fuentes excelentes. Estos alimentos contribuyen a reducir los factores de riesgo cardiovascular al disminuir la presión arterial y aumentar la fluidez de la sangre. Asegúrese de incluirlos en su dieta diaria para gozar de una salud cardiaca óptima.
El chocolate con un 85% de cacao es una fuente de energía dietética, por su alto contenido en flavonoides y ácido oleico, así como por su potencial antioxidante. Comer este rico manjar puede ayudar a ralentizar el proceso de envejecimiento, activar nuestra circulación y protegernos de problemas cardíacos.
El aceite de oliva virgen extra es el acompañamiento perfecto de nuestras comidas, ya que nos protege de las enfermedades relacionadas con el corazón gracias a sus potentes antioxidantes y ácidos grasos.
El brécol es un alimento increíblemente saludable repleto de nutrientes esenciales como ácido fólico, hierro, calcio, vitamina K y zinc. Además, es bajo en calorías y grasas y abundante en fibra. Si además del brócoli quieres mejorar la salud de tu corazón, el ajo y la cebolla también son verduras excelentes.
Las fresas rebosan de minerales beneficiosos como potasio, magnesio y manganeso, así como vitaminas C, B2, B6 y ácido fólico. Repletas de antioxidantes gracias a su composición rica en flavonoides que ayudan a proteger las arterias y los vasos sanguíneos manteniendo una presión arterial equilibrada, ¡este es un tentempié que no querrás dejar pasar! Ésta es una de las frutas saludables para el corazón, pero tienes más opciones.
Consumir uno o dos dientes de ajo al día disminuye los niveles de colesterol LDL en sangre, además de evitar la formación de trombos por su efecto vasodilatador.
No sólo reduce los niveles de colesterol, ayuda a regular la presión arterial y a mantener un ritmo cardiaco constante, sino que también contribuye a ralentizar el proceso de envejecimiento de las células.
Este producto no sólo ayuda a reducir la hipertensión, sino que su contenido en fibra también puede contribuir a disminuir los niveles de colesterol.
Repleto de vitaminas del grupo B, vitamina E, minerales como el magnesio y el potasio, además de una abundante cantidad de fibra insoluble, el valor nutritivo de este producto es innegablemente extraordinario.
Los limones, las naranjas, las mandarinas y las limas están repletos de potentes antioxidantes que pueden ayudarnos a protegernos de las enfermedades cardiacas.
Ricos en ácidos grasos y vitaminas E, zinc y magnesio, su consumo moderado puede ayudar a reducir los niveles altos de colesterol.
Repleto de vitamina C, actúa como antioxidante para prevenir el envejecimiento celular. Por ello, es el complemento perfecto para prevenir las enfermedades cardiovasculares y el Alzheimer.
Abundante en vitamina E, este nutriente refuerza el sistema inmunitario y mantiene la piel sana.
Rebosantes de antioxidantes como el licopeno, vitaminas C y E, potasio y escasas calorías, los tomates son una excelente opción para la salud cardiovascular.
La soja es una fuente excelente de isoflavonas, potentes estrógenos vegetales conocidos por mejorar la salud y el bienestar.
Enlace de interés: La Asociación Pacientes de Corazón